Científicos en China han logrado un avance significativo en la tecnología de inteligencia artificial al desarrollar el primer chip del mundo hecho de carbono. Este innovador chip no solo es más rápido que los tradicionales, sino que también ofrece una mayor eficiencia energética. La creación de este chip representa un paso importante hacia la miniaturización y mejora del rendimiento en dispositivos de IA, lo que podría revolucionar la forma en que se procesan los datos y se ejecutan las aplicaciones inteligentes. Este avance podría tener un impacto considerable en diversas industrias, desde la computación hasta la automoción, al permitir un procesamiento más rápido y eficiente.
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