Chase Chrisley, hijo de las estrellas de reality Todd y Julie Chrisley, se encuentra en problemas legales mientras sus padres cumplen condena en prisión. A pesar de la situación familiar, Chase ha lanzado su propia marca de velas, buscando establecerse en el mundo empresarial. Además, ha expresado su esperanza de que el expresidente Donald Trump intervenga para liberar a sus padres. La familia Chrisley ha sido objeto de atención mediática, y Chase continúa siendo una figura relevante en el ámbito del entretenimiento, a pesar de los desafíos que enfrenta.
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