El bollo de piña de Hong Kong, conocido por su textura suave y su cobertura crujiente, ha generado debates sobre su origen. Algunos sugieren que su creación se debe a la influencia de la repostería japonesa, mientras que otros apuntan a México o a la creatividad de un panadero local. Este bollo se ha convertido en un símbolo de la cultura culinaria de Hong Kong, y su popularidad ha trascendido fronteras, convirtiéndose en un favorito tanto para locales como para turistas. A medida que se investiga su historia, se revelan las diversas influencias que han dado forma a este delicioso manjar.
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