El Partido Demócrata de Hong Kong, una vez un bastión de la oposición y defensor de la democracia en la región, se encuentra ahora al borde de la desaparición. La reciente represión política y los cambios en la normativa han desmantelado muchas de sus operaciones y han forzado a varios de sus líderes a abandonar la política. Entre las tácticas utilizadas contra el partido se incluyen arrestos a miembros claves y la imposición de normas que limitan su capacidad de organización y expresión. Sin embargo, la historia del Partido Demócrata es testimonio de las luchas por la democracia en Hong Kong, desde su fundación en 1994 hasta los desafíos actuales que enfrenta. A medida que el clima político cambia, el futuro del partido parece cada vez más incierto, dejando a sus seguidores preguntándose si podrán reconstituirse en el futuro.

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