El sector de energías renovables en China se encuentra en medio de una intensa competencia y un aumento de la presión regulatoria. Los precios en este sector han estado bajo un fuerte escrutinio, llevando a lo que se ha denominado una ‘competencia de eliminación’. Este fenómeno se traduce en la necesidad de que las empresas se ajusten o, de lo contrario, se vean obligadas a retirarse del mercado. La situación plantea retos significativos para las compañías del sector, que deben adaptarse a un entorno cambiante y competitivo para sobrevivir. A medida que las regulaciones se vuelven más estrictas y los costos de producción aumentan, solo aquellas empresas capaces de innovar y optimizar sus procesos tendrán la oportunidad de sobresalir.

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