El gobierno de Hong Kong ha decidido rechazar un informe emitido por una agencia de calificación crediticia de Estados Unidos, que sostiene que el mercado inmobiliario de la región está sufriendo de un exceso de oferta. Las autoridades locales aseguran que su evaluación no refleja con precisión el estado real del sector, argumentando que la demanda sigue activa y el mercado está aún en recuperación. Este rechazo es significativo, dado el impacto que pueden tener tales informes sobre la percepción internacional de la estabilidad económica de Hong Kong. La administración ha destacado su compromiso con la transparencia en el mercado y con proveer información veraz a los inversores y ciudadanos.
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