La reciente decisión de Hutchison Ports de abandonar sus operaciones en los puertos de Panamá es un claro indicativo de la situación preocupante que enfrenta el comercio en la región. Esta salida no solo afecta a la empresa, sino que también tiene repercusiones significativas en la economía local y en la competitividad del país en el comercio internacional. La falta de inversión y el deterioro de la infraestructura portuaria son factores que han contribuido a esta decisión, lo que pone de manifiesto la necesidad urgente de reformas y mejoras en el sector. La situación actual plantea interrogantes sobre el futuro del comercio en Panamá y su capacidad para atraer nuevas inversiones.
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