Un experto ha destacado que el suministro de energía en China se considera ‘bastante seguro’ gracias a la diversificación de sus importaciones. A través de una estrategia que incluye múltiples fuentes de energía, China logra reducir su dependencia de un único proveedor, lo que contribuye a la estabilidad de su suministro. Esta diversificación se traduce en una mejor capacidad para enfrentar crisis energéticas globales y garantizar un acceso constante a recursos energéticos.
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