Una mujer en China ha sorprendido a muchos al pagar 22,000 dólares para clonar a su perro fallecido utilizando una muestra de piel. Este gesto ha despertado un gran interés en internet, donde usuarios discuten las implicaciones éticas y emocionales de clonar mascotas. La historia resalta el lazo emocional que muchos propietarios sienten hacia sus animales y plantea preguntas sobre el futuro de la biotecnología en la conservación de la vida animal. La comunidad en línea está dividida sobre los méritos y la moralidad de este tipo de decisiones.

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