Una pareja de Hong Kong decidió transformar su vida después de que su hijo les pidiera pizza. Motivados por su deseo de ser mejores ejemplos para su hijo, comenzaron un viaje de pérdida de peso que resultó en la reducción de 50 kg entre ambos. Este cambio no solo mejoró su salud, sino que también les enseñó a su hijo sobre la importancia de un estilo de vida saludable. De esta forma, buscan inspirar a otros padres a hacerse cargo de su bienestar por el bien de sus familias.
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