Un activista ha solicitado al gobierno japonés que revoque un premio otorgado a un general estadounidense, argumentando que este individuo está vinculado a la muerte de 500,000 personas durante la Segunda Guerra Mundial. La controversia ha generado un debate sobre la memoria histórica y la reconciliación entre Japón y Estados Unidos, así como la forma en que se reconocen las acciones de figuras militares en el contexto de la guerra. La petición ha resonado en varios sectores de la sociedad japonesa, que se enfrenta a su pasado bélico y a las implicaciones de honrar a quienes estuvieron involucrados en conflictos tan devastadores.

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