El mercado global de viajes aéreos ha experimentado un notable rebote, alcanzando niveles previos a la pandemia. La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha expresado un optimismo renovado sobre el futuro, anticipando que para el año 2026, la región de Asia-Pacífico será clave en el crecimiento del tráfico aéreo mundial.
Según las proyecciones de IATA, se espera que el factor de ocupación en Asia-Pacífico alcance un récord regional del 84.4% el próximo año. Esto es un signo claro de la fuerte demanda de pasajeros, siendo China y India los principales motores de este crecimiento, impulsados por la recuperación del turismo y la expansión de las clases medias. Durante una conferencia de prensa en Beijing, se destacó que el regreso de los vuelos directos entre China e India, que se reanudaron a finales de octubre tras un parón de cinco años debido a la pandemia, es un hito significativo.
Las aerolíneas ya están operando rutas clave que conectan Nueva Delhi con Shanghái y Guangzhou, lo que facilita los viajes entre las dos naciones más pobladas del mundo. Como mencionó Xie Xingquan, vicepresidente regional de IATA para Asia del Norte: “Estamos optimistas sobre el crecimiento de la industria”. Este optimismo se ve reforzado por el relajamiento de las normas de visado para los visitantes chinos en múltiples países y la implementación de políticas de visado unilateral por parte de China, que han estimulado aún más la demanda de viajes.
Además, se espera que las exenciones de visado para los grupos turísticos chinos que viajan a Corea del Sur, así como el acceso sin visado para los visitantes surcoreanos a China, y la recíproca exención de visado entre China y Rusia, aumenten la demanda de viajes durante los períodos de vacaciones pico. Según Xie, estas medidas son fundamentales para el impulso a corto plazo del turismo en la región.
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