China ha tomado importantes medidas para fortalecer sus relaciones regionales mediante la construcción de nuevas líneas ferroviarias. Estas obras buscan no solo mejorar la infraestructura de transporte, sino también fomentar el comercio y la cooperación entre países vecinos. Al optimizar el movimiento de mercancías, China espera consolidar su papel como un actor clave en la economía regional. Además, esta iniciativa se alinea con su estrategia de desarrollo global, promoviendo un crecimiento económico compartido en la región.

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