China ha presentado un fondo nacional de capital de riesgo con el objetivo de canalizar dinero respaldado por el estado hacia inversiones en tecnología en etapas iniciales. Este movimiento, según las autoridades, podría redirigir trillones de yuanes hacia áreas de inversión seleccionadas. La ceremonia de lanzamiento del Fondo Nacional de Orientación de Capital de Riesgo se llevó a cabo el pasado viernes y también se introdujeron tres vehículos de inversión que abarcan importantes aglomeraciones regionales: el clúster de Beijing-Tianjin-Hebei, el Delta del Río Yangtsé y la Gran Área de la Bahía de Guangdong-Hong Kong-Macao.
Un funcionario del Ministerio de Finanzas destacó que este nuevo fondo se diferencia de programas anteriores en tres aspectos clave: un mayor respaldo fiscal, un mandato de inversión más agudo y efectos multiplicadores de capital más fuertes. “Estamos hablando de una inversión que prioriza invertir temprano, invertir poco, invertir a largo plazo e invertir en tecnología dura“, comentó el funcionario, quien también subrayó la importancia de centrarse en áreas de vanguardia como la inteligencia artificial, la biotecnología, la computación cuántica y las redes de telecomunicaciones 6G.
Para adaptarse a los largos períodos de investigación y desarrollo que suelen caracterizar a la tecnología dura, los ciclos de inversión del fondo están diseñados para durar aproximadamente entre 15 y 20 años. Estructuralmente, el programa contará con una estructura de tres niveles, con el fondo nacional en la parte superior, seguido de fondos regionales y sub-fondos. Se espera que el dinero se recaude a nivel regional y de sub-fondos a través de gobiernos locales, instituciones financieras y empresas, tanto estatales como privadas.
Según el funcionario del ministerio, “se espera que cientos de miles de millones en financiación fiscal aprovechen trillones en capital social más amplio“. Esta estrategia podría cambiar el panorama de la inversión tecnológica en el país.
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